La Catedral Metropolitana de Monterrey se encuentra cercana a los cuatro siglos de existencia. Durante este tiempo, tanto su importancia como su apariencia han evolucionado hasta convertirla en lo que es hoy.
Por Lily M. Garza
Hace algunas semanas, el INAH se mostró en desacuerdo con los trabajos que se estaban llevando a cabo en la Catedral de Monterrey. La Arquidiócesis de la ciudad decidió “mejorar” la apariencia del edificio realzando los elementos decorativos de la fachada y del exterior de la cúpula pintándolos de un tono más o menos café, en vez del color tradicional (entre arena y amarillo claro). Definitivamente, la Catedral luce sus adornos de manera distinta, más vistosa, pero existe una razón por la que el cambio no parece correcto: se trata de un edificio histórico.
Hacia 1596 se llevó a cabo la fundación oficial de la ciudad de Monterrey, en honor al gobernador de la Nueva España. En un principio, sus pobladores se establecieron hacia el Norte de los conocidos Ojos de Agua de Santa Lucía, pero debido a la destrucción seis años más tarde de las fincas por las constantes inundaciones y desbordamientos, se trasladaron al Sur de los mismos. Se trazó una plaza, y los primitivos convento e iglesia de San Francisco, fundados alrededor del año 1600, debieron reubicarse en lo que hoy es el edificio del Círculo Mercantil Mutualista.
Treinta años después de la fundación, en 1626, se inicia la construcción de la Iglesia Parroquial de Monterrey a base de piedra y ramas. Ésta se encontraba ubicada frente a la recién trazada plaza y mantuvo su rústico aspecto durante casi setenta años después de su edificación.
Uno de los primeros cementerios de la ciudad se encontraba precisamente a su lado y bajo su jurisdicción. En él se enterraba únicamente a los españoles, pues a los indios les correspondía el cementerio del convento de San Francisco. Ambos fueron clausurados con la apertura del de la Purísima, en 1819.
A partir del centenario de su creación, la Iglesia Parroquial fue sujeta a diversos cambios en su construcción, mismos que mejoraron mucho su aspecto y su solidez. Se dispuso el primer cuerpo de torres: en una se encontraban las campanas, en la otra, un reloj fabricado en 1786 y colocado en 1817, que sería reemplazado por el actual en 1904. Alrededor del año 1800 se llevarían a cabo las obras de la portada, de influencia barroca. Esta remodelación culminaría en 1899, cuando finaliza la erección de la torre mayor, de tres cuerpos.
Pero con todo, la Iglesia Parroquial seguía siendo, a principios del siglo XIX, sólo eso.
En 1792 llegó al Obispado de Linares (a donde pertenecía la ciudad) el doctor Andrés de Llanos y Valdés. Junto con él llegaron muchas iniciativas para favorecer a la región, como la fundación del Seminario, la construcción de un convento para mujeres y de un hospital (que se convertiría más tarde en el Colegio Civil). Sin embargo, muchas de ellas fueron obras inconclusas, entre ellas el proyecto para una Catedral.
La Catedral proyectada por Llanos y Valdés se ubicaría en la manzana que delimitan las actuales calles de Colegio Civil, Galeana, Gral. Tapia y Gral. Treviño, pues el terreno era mucho más plano y más favorable para que la ciudad se distribuyera en torno a ella. Sin embargo, la construcción fue suspendida casi en sus comienzos, debido a desacuerdos entre el Cabildo de la ciudad y el obispo.
La Catedral proyectada por Llanos y Valdés se ubicaría en la manzana que delimitan las actuales calles de Colegio Civil, Galeana, Gral. Tapia y Gral. Treviño, pues el terreno era mucho más plano y más favorable para que la ciudad se distribuyera en torno a ella. Sin embargo, la construcción fue suspendida casi en sus comienzos, debido a desacuerdos entre el Cabildo de la ciudad y el obispo.
Llanos, frustrado por sus abandonados proyectos, se retiró de la ciudad. De la que sería su Catedral quedarían sólo pedazos que el tiempo se encargaría de destruir. Los muros, partes más sólidas de la construcción, sirvieron en tiempos posteriores como defensa ante los ataques a la ciudad y al sitio se le conoció con el nombre de ‘la Ciudadela’. En la actualidad, de ella sólo se conservan un muro que da a la avenida Juárez (antes calle del Roble) frente al cual se construyó un jardincito conmemorativo en 1940, y algunos pocos cañones que se colocaron en él. Es un espacio realmente pequeño y olvidado que funciona como biblioteca municipal.
Pese a los numerosos ruegos que el obispo hizo al Rey, disgustado por la ciudad, éste se negó a trasladar el obispado a la ciudad de Saltillo. La ciudad tuvo que esperar a que el Obispo Belauzarán, en 1833, diera a la humilde Iglesia Parroquial, primera de la ciudad y que daba hacia la Plaza de Armas (actual Plaza Zaragoza), el título de Catedral.
El paso del tiempo se encargó de llenar la Catedral de manifestaciones artísticas de distintos periodos.
En 1791 el templo era de planta cruciforme, pero pasó a ser de tres naves al convertirse en catedral. La fachada, aunque de estilo barroco tardío, sufrió modificaciones en 1933 al cubrirse con cemento; su diseño y su color parecido a la cantera eran muestra de austeridad. La puerta fue hecha también con influencia barroca.
En el interior se encuentran numerosas pinturas procedentes del periodo colonial, entre las que destaca el óleo llamado de las Ánimas, que data de 1767. La capilla del Sagrario sobresale por un frontal elaborado en plata durante el siglo XVIII. Hubo también un retablo de estilo churrigueresco que fue destruido a finales del s. XIX. Los impresionantes murales que se encuentran en el presbiterio son obra valiosa del pintor Ángel Zárraga, hechos entre 1942 y 1946; sin embargo, para realizarlos hubo que retirar un altar de mármol, mismo que había sustituido a uno barroco.
En el interior se encuentran numerosas pinturas procedentes del periodo colonial, entre las que destaca el óleo llamado de las Ánimas, que data de 1767. La capilla del Sagrario sobresale por un frontal elaborado en plata durante el siglo XVIII. Hubo también un retablo de estilo churrigueresco que fue destruido a finales del s. XIX. Los impresionantes murales que se encuentran en el presbiterio son obra valiosa del pintor Ángel Zárraga, hechos entre 1942 y 1946; sin embargo, para realizarlos hubo que retirar un altar de mármol, mismo que había sustituido a uno barroco.
El edificio experimentaría otras tres modificaciones más durante el siglo XX hasta llegar a su forma actual. Probablemente, si no se valora su importancia histórica, vivirá otras tantas.
Fuentes:
Roel, Santiago. Nuevo León. Apuntes Históricos. Monterrey: Ediciones Castillo, 1980.
México desconocido. www.mexicodesconocido.com.mx
12 comentarios:
Hola Lily!!
La película debería llamarse ¿Cómo destruir una gran obra? Se ve terrible!!! Y volvemos a lo mismo... la falta de cultura nos domina...
Me quiero volver chango!!!
Reyna
Wow, con éste sí te pasaste, y es información que debería ser más pública.
Pensaré an elgún videíto.
A mí si me gusta wue resalten en color más oscuro las ornamentaciones, y no me lo tomen a mal, soy muy fanática de ésta arquitectura, y la verdad es que el que la quieran tratar como fachadita de casa contemporánea le va bien, pero a estos edificios todo les va bien.
Lo importante es que resaltan detalles que mucha gente de seguro ni les había puesto atención, aparte, descansen tranquilos sabiendo que lo van a seguir pintando, con suerte con la misma gama de colores que ha tenido hasta ahorita. A mi parecer atrae a la vista pública el evidente legado histórico, que por estar donde está no se le vé mas que como otro ícono de la urbanidad que le rodea, malamente.
Con lo que sí estoy en desacuerdo es con las "modernizaciones" internas. Imagínate al padresito que quiso cambiar el altar barroco por el de mármol, diciéndole a otro "es lo que está de moda y hay que reflejar a la Iglesia como actual"... de ahí los tristes cuasi-coros de iglesia con un par de guitarras ac[usticas y la plebe cantando.
En fin.
¿Qué tal uno del Obispado? =P
Hola Lily!
orale, la neta no tenía ni idea de lamitad de la información que tu acabas de proporcionarnos, y mucho menos de todos los cambios que ha sufrido, ni si quiera conozco mucho de estilos arquitectonicos ni nada de eso, pero con lo poco que se pues si se ve que le han cambiado mucho, además de que la que iba a ser la catedral original pues yo ni en cuenta de cual era su proposito primero. Excelente, cuidate, nos vemos n_n
Excelente trabajo sobre las iglesias....
A mi me gustaría vivir en una de ellas jajajaja
un saludo.
La pregunta es, si queremos conservar la Catedral como monumento histórico que pase intacto a la posteridad, que represente lo que alguna vez fue y sea admirado por lo lejano que está a nuestro mundo actual; o si queremos hacer de la Catedral un lugar que cambie junto con nosotros, y que nos acompañe a la posteridad como mezcla de distintas épocas, representando la vez parte de lo que somos y lo que éramos...
Por cómo soy, preferiría que ya no le hagan nada a la pobre Catedral y la dejen como está. Siempre pueden construirse nuevos edificios; deberían conservar los que tenemos, que son parte del pasado en el presente.
No tenía idea de la historia de la Catedral, gracias por los datos :D
Un beso, te quiero mucho!!! ^^
Ta fille
Cary
Hola mi lily!!!
Oye super bn esta vez, y sabes porq? porq incluso para personas como yo, q no somos de mexico, el reportaje nos entrega una vision muy clara de lo q pasa con un monumento historico y como muchas veces, no valoramos realmente el pasado y la importancia q estos tienen en nuestra cultura.
Como siempre la MEJOR!..tkm..
Mayra Pineda.
Colombia
hola Lili
muy bien documentado el artículo, me gustó :)
personelmente pienso que si de cualquier modo ya le han hecho cambios a la catedral a lo largo de la historia, pueden seguirlo haciendo... siempre y cuando luzca bien...
últimamente no he pasado por ahí así que no se como se vea, me tendré que dar una vuelta por ahí...
muy bien, Lily, para mi que soy de otro estado, esta muy interesante tu articulo pues ni idea de como se habia llegado a la actual fachada. Felicidades por tu labor, surte, con afecto, lulu
Saludos!
Directo al grano: una vez mas lograste iluminar a las ignorantes masas regiomontanas con tu articulo, y por eso te felicito. La verdad, me incluyo en ese grupo, ignoraba basicamente todo lo que mencionaste y me alegra saber ahora un poco mas de la historia de esta localidad. Felicidades por tan excelso material y sigue escribiendo, vale la pena,
M.
Hola
He leido tu artículo y me pareciò muy interesante.
Sigue asi....
Felicidades!!
MI AMOR
La verdad no quería destruir la difusión de tu articulo con mi falta de objetividad, pero tengo que decirte que está excelente. Ya tienes más datos que yo sobre la catedral jajajajaja. Me gustó muchísimo. Te quiero.
Atte.
Ram D.Teach
hola!
està bien bien la informaciòn
muy interesante
yo no sabìa que habìa panteones por ahì o.0!
bueno, tambièn se me hace muy poètico eso de los ojos de santa lucìa *.*
bueno bye =)
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